Una palabra sobre la vida y las cosas


           

 

El pastor

         Las ovejas son animales mansos. Son animales tranquilos, que se mantienen apartados del resto del mundo. En manada, escuchan a sus líderes. Las ovejas también tienen un carácter obediente. También les encanta estar en manada. Las ovejas deben tener un líder, un pastor u otra oveja con un cascabel, y deben ser guiadas y decirles qué hacer y dónde ir. Reconocen el sonido de la campana o la voz del pastor. Muchos rebaños diferentes pueden estar en un pasto y cuando escuchan la voz del pastor para un rebaño en particular, las ovejas que pertenecen a ese pastor lo seguirán a él y solo a él. Las ovejas no son conducidas, deben ser conducidas. Las ovejas son los únicos animales de la Tierra que no pueden defenderse, son totalmente vulnerables.

      Un hombre estaba en África y vio un gran lago donde muchos animales se detenían a beber agua. De repente llegó un pastor con unas doscientas ovejas y empezaron a beber, y luego vino otro pastor, y mi amiga pensó: “Ay, ¿cómo van a saber qué ovejas son de qué pastor?”. Entonces llegó un pastor más con más ovejas. Notó que los pastores hablaban entre ellos mientras las ovejas bebían. Un rato después, cada pastor se fue, y las ovejas escucharon cuando su pastor las llamó. Cada rebaño seguía a su pastor, sin confundirse.

      Jesús es retratado como un buen pastor. Él ama a Su rebaño y los conduce a donde deben ir. Su rebaño conoce Su voz. A menudo lo escuchamos, pero es posible que no sigamos el camino que deberíamos. Llenamos nuestras vidas con muchas cosas que hacer. No tenemos tiempo para las cosas de Dios. No podemos ser guiados si ignoramos la voz del Señor. Dios nunca nos obligará a hacer nada. Él nos guía con una voz suave. Depende de nosotros seguir a donde Él nos guíe. Necesitamos ser mansos y tranquilos y mantenernos apartados de este mundo y tener una naturaleza obediente a Él, para que podamos escucharlo y seguir el camino que Él nos guía.


      Nueva versión King James
Juan 10:1 ¶ De cierto, de cierto os digo, que el que no entra por la puerta en el redil de las ovejas, sino que sube por otra parte, ése es ladrón y salteador.
 2 "Pero el que entra por la puerta es el pastor de las ovejas.
 3 A él abre el portero, y las ovejas oyen su voz; y él llama a sus ovejas por nombre y las saca.
 4 "Y cuando saca sus propias ovejas, va delante de ellas; y las ovejas lo siguen, porque conocen su voz.